Valoración de VaDeCine.es: 6
Título original: San qiang pai an jing qi
Nacionalidad: China
Año: 2009 Duración: 95 min.
Dirección: Zhang Yimou
Guión: Xu Zhengchao, Shi Jianquan (remake Blood Simple, Joel & Ethan Coen)
Fotografía: Zhao Xiaoding
Música: Zhao Lin
Intérpretes: Sun Honglei (Zhang), Xiao Shenyang (Li), Yan Ni (mujer de Wang), Ni Dahong (Wang), Cheng Ye (Zhao), Mao Mao (Chen)
Trailer
Ficha técnica en Sensacine
¿CUARTO DE LIBRA O ROYAL CON QUESO?
Si, como explicaba Vincent a Julius, la diferencia entre el original burger yanqui y su franquicia extranjera estriba en los pequeños detalles, la llevanza del american brand Coen a la China milenaria no es sino otro singular caso de franquiciado. La esencia permanece y las divergencias, si bien merecen una distendida conversación, tampoco hacen imprescindible el rodaje de un remake, revisión o traslación fílmica, como bien tengan en llamarlo.
Y no es que Una mujer, una pistola y una tienda de fideos chinos carezca de virtudes, que las tiene y en abundancia, sino que buena parte de ellas se heredan de la magnífica primigenia Sangre Fácil. Allí están, más allá del adaptado argumento, el juego del ratón y el gato, el malentendido y la codicia como motores de la historia y, sobre todo, el indeleble brazo ejecutor de la venganza del marido corneado: ese maquiavélico asesino a sueldo alejado de cualquier tipo de escrúpulo.

Más allá de eso, Zhang Yimou nos tiene acostumbrados al eclecticismo; de su sencilla y emotiva Ni uno menos a la espectacular Hero, pasando por la orquestación de la ceremonia inaugural de las Olimpiadas de Pekín. Ahora, 'desoccidentalizando' un relato de los Coen rinde tributo explícito a estos y compone una buena traslación del mismo, añadiendo un par de elementos clave para diferenciar su adaptación: de un lado, el humor oriental; del otro, la unicidad de escenarios para que los personajes entren y salgan de ellos a modo de guiñol. Ambos puntos, provenientes del deseo de Yimou de filmar la historia como sainete agridulce -linaje de la ópera JingJu-, funcionarán, a ojos del espectador, de manera desigual: muy subjetivamente el referente a la comicidad asiática y objetivamente bien la focalización de las localizaciones, desembocando esta última característica en un genial in crescendo narrativo por reiteración más que destacable.
Con todo, expuestos el provechoso desempeño general, el virtuosismo de la puesta en escena de estética western y el ramillete de virtudes que coronan el nuevo trabajo de Zhang Yimou, si al regresar del cine uno se anima a reponer en su dvd la fatalista e inteligente ópera prima de los hermanos Coen, confirmará que, como ya sospechaba, el costillar, la salsa barbacoa y la hamburguesa resultan infinitamente más exquisitas con denominación de origen; maceradas por el sofocante aire texano.

Una mujer supuestamente infiel, decide comprar un arma para matar a su marido que es un próspero hombre de negocios, al enterarse este de los propósitos de su mujer decide contratar a un policía corrupto para terminar con la vida de la mujer y del amante, y a partir de ahí empieza una serie de acontecimientos que transforman todo en un caos vodevilesco.
Igual de aburrida que de colorista, con un humor negro con poca gracia, de la que solo se salvan un par de momentos. Una estética muy oriental, una fotografía de la que cabe destacar los contrastes cromáticos y unos personajes muy estrafalarios.
Y poco más, puedo añadir sobre este extraño largometraje, que quizá agrade a los seguidores del cine proveniente de China, o a los admiradores de este director Zhang Yimou.
En el cartel publicitario, pone que esta basada en la película “Sangre fácil” de los Hermanos Coen, he de reconocer que ahora mismo no recuerdo si la he visto, los que la hayan visto, seguramente harán sesudas comparaciones entre ambas películas.
Yo personalmente prefiero otros trabajos de este director, entre los que se encuentran Hero o La casa de las dagas voladoras.